Hace veinte años nacía en Ferrara una empresa que
desde sus comienzos ha tratado de articular su labor de cara a la reducción del
impacto ambiental. Perfil de Iperwood, una empresa que produce y comercializa
Novowood, un material compuesto sostenible fruto de una idea centrada en hallar
productos de bajo impacto ambiental y mantenimiento reducido. Para FARE
INSIEME, Giampaolo Colletti entrevista a Andrea Pizzardi, director ejecutivo de
Iperwood
de Giampaolo Colletti
@gpcolletti
Photocredit: Giacomo Maestri e Francesca Aufiero
Su forma de pensar rompió los esquemas.
Es más: se adelantaron a las emergencias medioambientales y decidieron hacer
innovación sostenible antes que los demás. Las mejores organizaciones se
plantean continuamente cómo será el mundo que está por venir, pero en Ferrara
hay una empresa que nació ya proyectada hacia el futuro. Ese futuro lleva la
fecha de 2002, cuando hablar de impacto ambiental era todavía cosa de pioneros.
Sin embargo, a alguien se le metió en la cabeza que había que cambiar las
cosas. Así es como nació Iperwood, fruto de una experiencia de más de treinta
años en el mercado de la madera exótica, sobre todo en la investigación y
comercialización de esencias de alta durabilidad para varios campos de
aplicación.
La idea sostenible. Quien puso en
pie esta empresa de corazón verde es Andrea Pizzardi, nacido en 1979 y director
ejecutivo de Iperwood. Empezó a trabajar desde joven en la empresa del padre,
ligada a la construcción de puertos turísticos y muelles flotantes. «Para crear doce metros de pasarela lineal era
necesario talar casi tres árboles. Demasiado derroche. Había que pensar
en algo diferente, y sobre todo ponerlo
en práctica. La madera para decoración de
interiores dura una vida, pero vernos teniendo que talar varios árboles para
luego pisarlos nos hizo recapacitar», recuerda Pizzardi. Un objetivo desafiante: investigar, analizar y
comercializar esencias leñosas con una elevada durabilidad como característica
común y aptas en ámbitos de aplicación en los que se requiere o es necesario un
mantenimiento reducido. Estos abarcan desde balizas de río y mar resistentes al
ataque de microorganismos acuáticos, hasta tablestacas de esencias exóticas que
duran cien años, empleadas como diques de contención en ríos y canales. De ahí
la idea de crear un producto de material compuesto para aplicaciones de
revestimiento horizontales y verticales en la pavimentación de exteriores,
fachadas ventiladas, parasoles y celosías. Con los años, Iperwood se ha
impuesto en el mercado con la comercialización de Novowood, un nuevo material
fruto de mucha labor de investigación y experimentación que está presente en 33
países del mundo. Hoy Iperwood se
extiende sobre una superficie de unos 8.000 metros cuadrados (de los cuales,
5.000 en naves industriales), cuenta con una plantilla de 23 personas más 16
agentes de ventas en el mercado italiano y alcanza un volumen de negocio de 4,5
millones de euros, con un crecimiento del +20-25 %. Y un mercado exterior en
proceso de ampliación, ligado por el momento al 15 % de los productos
realizados. «Estamos experimentando una gran expansión. Empezamos como empresa
dedicada a la investigación y hoy disponemos de cuatro líneas de extrusión y un
laboratorio de análisis propio, además de un Departamento Técnico-Comercial
formado por 10 personas. El crecimiento requiere mayores recursos y no paramos
de contratar personal», dice Pizzardi.
La historia. Investigación, decíamos antes. Mucha, y
transversal. Así es como se crea un producto que ofrece garantías de
durabilidad y que, por el tipo de producción, permite recuperar materias primas
recicladas, además de ofrecer la posibilidad de regenerarlo varias veces al
término de su ciclo de vida. En 2004, en colaboración con la Facultad de
Ingeniería de Materiales de la Universidad de Ferrara, se puso en marcha la fase
de desarrollo de Novowood. Se trataba de un nuevo material compuesto creado a
partir de harinas de madera recuperada y polímeros. La labor de investigación
se marcó como meta unas exigencias de mantenimiento reducidas y la resistencia
del compuesto a los climas marinos, los más agresivos para todo tipo de
material. Después de muchos análisis y ensayos de laboratorio, ese mismo año se
produjo el primer listón extrusionado de Novowood. El producto se ofreció
enseguida en el mercado de los puertos turísticos y los muelles flotantes y,
gracias al éxito que tuvo, en 2008 su ámbito de aplicación se amplió también al
mercado de la construcción. «Para la producción de Novowood, utilizamos harinas
de madera derivadas del procesamiento de los residuos de transformación generados
por las fábricas que trabajan la madera, como el serrín y las virutas. No
talamos ningún árbol para obtener el producto, que está compuesto por polímeros
derivados también de los descartes generados en la producción de materiales
plásticos. Todo ello se mezcla con un 10 % de aditivos, que son los que
determinan el color y la durabilidad», precisa Pizzardi.
Además de proceder de materias
primas secundarias, al término de su ciclo de vida Novowood puede volver a ser
molido y regenerado hasta veinte veces. «Hemos creado, pues, un producto con
una vida útil superior a 300 años. Por estas razones, nos permitimos afirmar
que es una excelencia. El
estudio se ha basado en la voluntad de eliminar los defectos comunes de la
madera, evitando su mantenimiento y decoloración», dice Pizzardi. Iperwood es,
por tanto, capaz de ofrecer a sus clientes sistemas y soluciones innovadoras
para entablados, revestimiento, persianas y paneles corredizos, además de
sistemas especiales de subestructura aptos para múltiples campos de aplicación.
Luego está también el Departamento Técnico de vanguardia, que ayuda a los
proyectistas en la creación de revestimientos de alto impacto visual. La
evolución de Novowood y su cada vez mayor preocupación por el medioambiente le
han valido, en 2021, la certificación ReMade in Italy, que reconoce, además de
la producción en Italia, el porcentaje de material reciclado en su interior. Un
dato importante: se trata del 81,5 %. «Nos estamos encaminando cada vez más a
la innovación del producto, de nuestra gama de perfiles y acabados, así como de
los sistemas integrados, es decir, lograr que el conjunto de los accesorios
necesarios facilite la aplicación del producto. Además, nos estamos focalizando
en ámbitos nuevos, escuchando también las necesidades de los clientes y de los
mercados», concluye Pizzardi. Cuando se habla de sostenibilidad, más allá de
los eslóganes, lo que cuenta son los hechos.
https://podcast.confindustriaemilia.it/
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