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FARE INSIEME - Ep. 95 - Caffè Cagliari, historia de una empresa y de una comunidad

«Transmitimos la pasión por el café»

28/11/2022

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Todo empezó en 1909, cuando Ambrogio Cagliari, después de una larga permanencia en Brasil y respaldado por los numerosos reconocimientos recibidos por sus preciadas mezclas de café, decidió abrir en Módena el primer taller de tueste y degustación.  En la actualidad, Caffè Cagliari es una excelencia que desde Emilia-Romaña llega a cubrir 40 países del mundo. Uno de los pocos tostaderos en los que aún se produce siguiendo el método tradicional del tueste por separado. Para FARE INSIEME, Giampaolo Colletti entrevista a Alessandra Cagliari, directora ejecutiva de Caffè Cagliari

de Giampaolo Colletti
@gpcolletti

Photocredit: Giacomo Maestri e Francesca Aufiero

Hay un reloj que marca el tiempo a toda su ciudad. Y que en el fondo cuenta todo lo que fue y todo lo que será. Un reloj bello y valioso, el punto de referencia de su gente. Para contar la historia de Caffè Cagliari y de los fuertes lazos que mantiene con las tierras emilianas, tenemos que empezar echando atrás las manijas de ese reloj: nos hallamos en ese edificio histórico situado a las puertas de la ciudad de Módena que es todo un icono por su fachada decorada con enormes granos de café, pero comenzamos dando un salto atrás en el tiempo. Incluso más de uno. Todo empezó en el lejano 1909, cuando Ambrogio Cagliari, quien por entonces tenía poco más de veinte años, volvió a Italia tras una larga permanencia en Brasil. En las plantaciones, en Sudamérica, Ambrogio se apasionó al café y de simple jornalero se hizo un gran experto en su selección y tueste, recibiendo numerosos reconocimientos por sus preciadas mezclas de café. Así pues, decidió abrir en Módena (en la plaza principal, símbolo de la ciudad, al lado de la catedral) su primer taller de tueste y degustación del café. Ya en 1911, la empresa ganó la medalla de oro en la Exposición Universal de Génova. Hoy igual que ayer, Caffè Cagliari sigue siendo una empresa orgullosamente familiar, capitaneada por la cuarta generación con la misma pasión de siempre. «Creemos en la excelencia y, a través de nuestro patrimonio de cultura y tradición, obtenemos siempre el mejor café, apoyando la investigación y la innovación. Es por eso que llevamos más de cien años custodiando y transmitiendo, a lo largo de cuatro generaciones, la experiencia y el amor por el café», afirma Alessandra Cagliari, directora ejecutiva de Caffè Cagliari. De Módena al mundo entero, en nombre del café. Del buen café, hecho de investigación, tradición y pasión. El que se hace con el corazón. En la actualidad, Caffè Cagliari está presente en más de 40 países del mundo, con un volumen de negocio que ronda los 20 millones de euros y un equipo compuesto por 80 personas, entre plantilla y agentes de ventas. «La nuestra es una historia de éxito empresarial, común a muchas empresas del territorio, gracias al espíritu emprendedor de un hombre, mi abuelo, quien, con mucho sacrificio y una gran determinación, supo hacer su sueño realidad. Desde siempre, nuestro objetivo principal es la calidad, tanto del producto como del servicio que ofrecemos. Autenticidad y sinceridad son los valores que nos guían en nuestra forma de hacer empresa», precisa Cagliari.

Historia de una empresa.
Un pasado que leer bajo el signo de las innovaciones, de una idea de futuro que perseguir con determinación. El éxito logrado durante la posguerra hizo que Caffè Cagliari se distribuyera en varios canales de venta, por lo que en 1963 se inauguró la nueva planta en la calle Emilia, con un taller de producción de vanguardia. En años más recientes, esto es, en 2006, llegó la innovación, con las especiales válvulas de alta presión en los envases destinados a bares. Caffè Cagliari es uno de los pocos tostaderos que aún produce siguiendo el método tradicional del tueste por separado. Cada origen de café tiene propiedades organolépticas diferentes, que requieren temperaturas y tiempos de cocción distintos para garantizar la calidad de cada grano. La fragancia y los aromas de las mezclas son protegidos mediante los sistemas de envasado más avanzados. La innovadora válvula unidireccional de alta presión, presente en los envases de uso profesional, mantiene inalteradas las propiedades del café y permite obtener un resultado excepcional en la taza. El futuro es de quienes tienen un gran pasado a sus espaldas. Así, en 2009, con ocasión del centenario de la empresa, se inauguró el museo de la misma, dedicado a las máquinas de café, una colección extraordinaria porque es una de las mayores exposiciones de máquinas de café espresso profesionales del mundo, con más de 120 piezas fabricadas entre 1900 y hoy.

El futuro del café.
Detrás de esta empresa hay mucha labor de investigación. «Es la parte dinámica de la empresa, que sigue las señales del mercado. Estamos trabajando en dos frentes: producto y proceso: probamos nuevos orígenes y combinaciones nuevas en nuestro laboratorio de calidad, en línea con la tendencia de mercado que busca experimentar nuevos métodos de extracción alternativos al espresso y hallar nuevos aromas y gustos, como el café de un solo origen y las especialidades. Se habla de la cuarta ola del café, guiada por consumidores más informados y abiertos a las novedades y a influencias que vienen de otros países. Además hemos iniciado un proceso encaminado a la sostenibilidad medioambiental y a la eficiencia energética: la nueva instalación de placas solares nos ha llevado a un autoabastecimiento del 50 % y estamos haciendo inversiones y modificaciones en los procesos de producción para lograr utilizar en breve nuevos sistemas y materiales de envasado más sostenibles, fáciles de desechar y reciclables, que permitan conservar al mismo tiempo la calidad y las características organolépticas del producto», dice Cagliari. Ahora es el tiempo de una gran renovación, que pasa por la reforma y ampliación de la nueva sede, el flamante almacén automatizado, las nuevas instalaciones de envasado o el laboratorio de calidad, que será ampliado dentro de poco, mientras que la sede histórica se convertirá en un verdadero polo cultural del café y reunirá el centro de formación Scuola del Caffè y el nuevo Museo del Caffè. Tener unidos el pasado y el futuro, viviendo mejor el presente: algo que solo las grandes empresas saben hacer.

https://podcast.confindustriaemilia.it/

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